Hace poco un alumno me preguntó si podía dejar lo mismo que tenía en su CV en su LinkedIn, y si bien el tema parece obvio, podría jugarte en contra. Te explico:
Caso 1: Incongruencia entre CV y LinkedIn
Supongamos que un reclutador ve el CV de un candidato para un puesto de Jefe de Comunicación. Se interesa, pero ahora lo busca en LinkedIn. Al revisarlo encuentra algo totalmente diferente: experiencias no mencionadas, un enfoque hacia el diseño gráfico o el marketing, y hasta una propuesta profesional que apunta a otro sector.
¿Qué pensará el reclutador?
Que hay incongruencia, confusión o incluso falta de claridad en el perfil. Eso, en segundos, puede costarte la entrevista.
Caso 2: Querer aplicar a varios cargos al mismo tiempo
Supongamos que quieres postular tanto a Gerente de Comunicación como a Gerente de Marketing. Si tu perfil solo refleja el área de Comunicación, no serás visible para reclutadores de Marketing. Pero si intentas mezclar ambos en tu titular o extracto, la plataforma y los algoritmos pueden no entender bien tu enfoque.
Y si la máquina no lo entiende, las personas menos aún.
Caso 3: Tu perfil parece una mezcla sin foco
Esto lo explico siempre cuando hablo de las habilidades en forma de T.
Un perfil puede tener muchas experiencias, pero si en LinkedIn (o portales de empleo) aparece como un «mixto» sin dirección clara, el reclutador puede pensar:
- «Ha hecho de todo, pero no profundiza en nada.»
- «Hay tanta información que no sé a qué se dedica realmente.»
- «No es lo que buscamos, pasemos al siguiente.»
¿Qué hacer con tu perfil online?
Aquí va un truco sencillo, pero potente:
Contenido solo para alumnos de cursos o membresía
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