Saber manejar el estrés implica desarrollar habilidades para identificar y controlar los factores estresantes, establecer límites saludables entre el trabajo y la vida personal, practicar la relajación y la meditación, hacer ejercicio regularmente y buscar apoyo emocional cuando sea necesario. Al aprender a manejar el estrés de manera efectiva, se pueden mejorar tanto la salud como el desempeño laboral.
Los reclutadores buscan un profesional que tenga habilidades para manejar diferentes tipos de estrés. El candidato ideal debe ser capaz de enfrentarse a la adversidad con objetividad y racionalidad, establecer nuevos objetivos y prioridades, y mantener la confianza en sí mismo en situaciones inesperadas.
Además, es importante que el candidato sea realista con respecto a lo que puede lograrse dentro de un período de tiempo determinado. Los reclutadores valoran a los candidatos que pueden trabajar bajo presión y cumplir con plazos ajustados sin comprometer la calidad del trabajo.

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Es especialmente importante saber manejar el estrés en trabajos con gran carga de trabajo o picos de estrés porque estos momentos pueden ser muy demandantes y pueden afectar negativamente la salud mental y física de las personas. Los trabajos estresantes pueden llevar a una mayor presión, plazos ajustados, largas horas de trabajo y responsabilidades importantes, lo que puede generar ansiedad y tensión.
El estrés prolongado en estos trabajos puede causar agotamiento emocional, problemas de concentración, fatiga, irritabilidad y otros síntomas que pueden afectar la calidad del trabajo y la satisfacción laboral. Además, el estrés no manejado adecuadamente puede llevar a una disminución significativa del desempeño laboral y aumentar la probabilidad de errores y accidentes.
Aprender a manejar el estrés en trabajos con gran carga de trabajo o estrés implica desarrollar habilidades para identificar y controlar los factores estresantes, establecer límites saludables entre el trabajo y la vida personal, practicar la relajación y la meditación, hacer ejercicio regularmente y buscar apoyo emocional cuando sea necesario. Al aprender a manejar el estrés de manera efectiva, se puede mejorar tanto la salud como el desempeño laboral en trabajos con alta demanda.